Un punto ciego es un “hueco” que no podemos ver desde nuestra posición y esto nos puede generar un accidente, por ejemplo. En tu búsqueda de empleo también existen puntos ciegos y necesitas detectarlos antes de que sea demasiado tarde.
Te cuento los 2 puntos ciegos más habituales a través de la historia de uno de mis clientes, Elías Domingo.
Elías es un profesional especializado en el mundo de la comunicación corporativa. Aunque a Elías nunca le había faltado trabajo (Grupo Zeta, La Región, Coren, Renault), sentía que no tenía el control de su carrera, pues no terminaba de ir en la dirección que quería.
En realidad, estaba sufriendo el impacto de 2 puntos ciegos muy comunes en la búsqueda de empleo.
- 1º Punto ciego: La inercia laboral.
La inercia laboral es un enemigo implacable, porque al ser un elemento invisible es difícil de detectar.
Elías: “Cuando llevas 20 años trabajando muy enfocado a resultados y al corto plazo, la inercia laboral impide constantemente que te detengas a pensar hacia dónde quieres ir. Todos queremos hacer muchos cambios, pero el día a día nos consume… y al final no estás construyendo nada bueno largo plazo”.
Cuando no sabes a dónde quieres ir, es como ir en un barco a la deriva. Y las consecuencias de ir a la deriva en tu carrera pueden ser graves.
Por este motivo, Elías me escribió.
Principalmente, Elías vio en mí un aliado que le permitiera detener esta inercia y que le ayudara a ordenar su carrera profesional con criterio y objetividad.
- 2º punto ciego: La propuesta de valor
“Mi propuesta de valor era como una botella de cristal en el mar. Yo daba por hecho que todo el mundo tenía que saber a qué me dedicaba. Cuáles eran mis logros, mis fortalezas… y es en ese momento en el que piensas que no estaba siendo capaz de comunicar adecuadamente el mensaje.
¿Esto es un punto que duele un poco, no crees? Porque dedicándote a la comunicación… en casa del herrero, cuchillo de palo”.
Elías y yo nos pusimos a trabajar juntos y finalmente conseguimos detener la inercia laboral que estaba amenazando con teñir de gris su carrera, reorganizar prioridades e insuflar un soplo de aire fresco a su carrera profesional.
Poco después, Elías encontró el trabajo con las condiciones que buscaba y grabamos una entrevista para cerrar el círculo de nuestra colaboración.
Para finalizar, dejo una cita del mismo Elías que resume muy bien nuestro camino:
“En el trabajo, muchas veces nos dejamos llevar por un factor que es el salario. Todos necesitamos el trabajo para vivir… pero después descubres que no vas a dar el 100% de tu potencial… o ni siquiera el 50% si no estás trabajando en un sitio que te motive”.
PD: conoce el mismo método que realizó Elías, el Método MAPA.
Si te sientes identificado, comenta o escríbeme y vemos tu caso.